En tiempo de compensación, ya el reloj estaba agónico, un grupo importante de los aficionados que acompañaron a Chivas no pudo ver el gol del triunfo de su equipo. Rafael Márquez al 92’, sacó magia de sus zapatos, cobró una falta y el balón lo mandó al fondo de las redes para darle la voltereta al marcador y dejarlo 1-2 a favor de los Rojiblancos. En la cuna de la Independencia, Guadalajara dio el grito adelantado y silenció al Nou Camp.
El cuadro del Bajío tiene claro un sistema de juego, que es el de salir a presionar a su rival, asfixiarlo y taparle todos los sectores del campo, Chivas sufrió en carne propia la motivación del rival y en los primeros 45 minutos se vio superado en el campo, pero el cuadro local no lo pudo reflejar en el marcador.
Guadalajara, antes del minuto 15 trató de dar pelea al cuadro Esmeralda, pero tras la lesión de Marco Fabián, el equipo que dirige John Van’t Schip no pudo retomar ningún balón para poder tener presencia de peligro en el área del cuadro leonés.
Por las bandas, izquierda, derecha, el centro, cualquier hueco era aprovechado por los Panzas Verdes para generar llegada, aunque no tenían el tino, además de que el portero de los Rojiblancos, en dos ocasiones tuvo que esforzarse al máximo para sacar dos balones de peligro.
Lo mejor que le pudo pasar a Chivas, es que en el primer tiempo, ni Sebastián Maz ni Matías Britos no traían fina su puntería.
Y como si algo más le faltara al Guadalajara para entregarle el dominio de juego al León, se quedaron con un hombre menos, tras la expulsión de Xavier Báez, quien no podía creer la roja que le sacó el central Roberto García Orozco, ya que en la jugada toca el balón y no va en busca del adversario.
León se tuvo que ir al descanso con el control del juego, más no en el marcador, Chivas a replantear el juego para la segunda parte.
Parecía que la mesa estaba puesta para que León pudiera ganar el juego, sin embargo, Guadalajara salió con mejor orden a jugar los siguientes 45 minutos.
Chivas llevaba bien el cotejo, no dejaba que la fiera se desatara sobre su marco, pero fue al 75’, cuando el Estadio Nou Camp estalló en júbilo. José Vázquez cobró de manera perfecta el penalti, venció al portero rojiblanco, Luis Michel para poner el 1-0.
El gusto le duró poco a León, Jonny Magallón se hizo expulsar en la recta final del juego. Chivas se acordó que debía reaccionar. Generaron un tiro de esquina y al 82’, el ‘Chatón’ Enríquez, apareció sin marca dentro del área grande y remató con la cabeza para mandar el balón a las redes y silenciar un estadio que ya celebraba un triunfo.
El reloj marcaba ya tiempo de compensación, Chivas tuvo una falta cerca del área grande. Rafael Márquez pidió el balón, vino el silbatazo del árbitro, y con toque fino, el delantero de Guadalajara puso la pelota a sacudir las redes para el 1-2 al 92’.
Aficionados de Guadalajara salieron de todas partes y con sus gritos opacaron las tribunas del Nou Camp, que no podían creer que les sacaron el triunfo en cuestión de 10 minutos. Van’t Schip corrió a celebrar el gol, que le viene a dar tranquilidad a su proyecto.
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